Dos nuevas propuestas senderistas permiten descubrir el cañón de Delika y ‘viajar’ del Valle Salado al lago natural de Caicedo-Yuso. ¿Te animas?
Álava es diversa en paisajes y colores: verdes y profundos valles, montañas escarpadas y roquedos, bosques interminables, playas de interior, campos de cereales, mar de viñedos… Caminar es la mejor forma de conocer todos sus rincones y secretos, empaparse de su cultura y costumbres y, por qué no, de cargarse de razones para disfrutar sin remordimientos de sus afamados vinos y gastronomía.
Hoy te proponemos dos recorridos para descubrir algunos de los paisajes más emblemáticos y espectaculares de Álava:
- la nueva ruta senderista que se adentra en el cañón de Delika, horadado sin prisa pero sin pausa desde hace siglos por el río Nervión, en la norteña comarca de Ayala;
- y un paseo histórico y natural que conecta las eras del Valle Salado y el lago Caicedo-Yuso al sur de la provincia.
1. La Senda Verde de Delika
Para afrontar la Senda Verde de Delika debemos acercarnos hasta la pequeña localidad del mismo nombre perteneciente al municipio de Amurrio. El viaje desde Vitoria-Gasteiz o Bilbao ofrece ya auténticas postales marcadas por el intenso verde de los valles de la zona y los grandes desniveles que dibuja en el horizonte la Sierra Salvada, y anticipa lo que el viajero se va a encontrar unos minutos después.
Este recorrido, de fácil acceso y perfectamente señalizado, está indicado para todos los públicos, ya que presenta una distancia de algo menos de 5 kilómetros y un desnivel muy suave que acumula apenas 115 metros. Hablamos así de un plan ideal para disfrutar de una mañana o tarde en familia y con niños y, de hecho, más de la mitad de la ruta (3,2 kilómetros) puede realizarse sin problemas en bicicleta.
La ruta arranca en Delika y remonta poco a poco el curso fluvial del río Nervión con los espectaculares paredones de la Sierra Salvada como telón de fondo.
La mayoría de quienes se acercan a conocer el salto del Nervión, el salto de agua más grande de España con sus casi 300 metros de caída, lo hace desde la parte superior de este accidente montañoso a través de los senderos que se asientan en el Monte Santiago. La Senda Verde de Delika permite, en cambio, disfrutar de este entorno natural y paisajístico desde una perspectiva muy diferente.
Los cinco kilómetros dan para mucho y bueno: prados, bosques autóctonos, roquedos, cascadas, saltos de agua… Dos hitos indispensables en el recorrido en los que detenerse, al menos unos minutos, son el mirador que permite al visitante contemplar varias cascadas en cadena y la zona de descanso y esparcimiento habilitada para el disfrute del caminante junto al puente de piedra de Zalborondo.
El caminante podrá disfrutar además a lo largo del recorrido varios espacios naturales de la Red Natura 2000.
2. El Valle Salado y el lago Caicedo-Yuso
Nos vamos del norte al sur de Álava. Nuestra segunda propuesta nos lleva al pueblo de Salinas de Añana y su incomparable Valle Salado. Indispensable conocer, antes o después de realizar la ruta, este espacio natural y cultural formado por cientos de eras o huertos de sal que dan forma a uno de los conjuntos arquitectónicos, paisajísticos, arqueológicos, geológicos e históricos más singulares del mundo.
Con este escenario tan especial como punto de partida, y con la novedad de la pasarela de madera de más de veinte metros de longitud sobre el río Muera inaugurada recientemente para conectar de forma más cómoda el Valle Salado con la senda, iniciamos esta interesante ruta que nos conducirá entre campos de cereales al lago natural más importante de Euskadi: el lago Caicedo-Yuso o Arreo.
Este recorrido tiene una longitud de cerca de 9 kilómetros y un desnivel acumulado de menos de 200 metros, y brinda la oportunidad de conocer varios edificios históricos y religiosos de interés como la iglesia de Santa María de Villacones (punto de partida de la ruta en Salinas de Añana), el Monasterio de San Juan de Acre y los Palacios de los Ozpinas (reconvertido hoy en hotel rural) y de los Herrán.
El lago Caicedo-Yuso, incluido como humedal de interés internacional en el convenio Ramsar e integrante de la Red Natura 2000, es punto obligado de parada, descanso y contemplación antes de regresar a nuestro lugar de partida. Este humedal natural y permanente, de unas 13 hectáreas de superficie, destaca por su profundidad y su gran biodiversidad, con presencia habitual de aves acuáticas y migratorias. No te olvides de los prismáticos.
Más planes para disfrutar de Álava en www.alavaturismo.eus
El Valle Salado inaugura una ruta para personas con movilidad reducida
El Valle Salado de Añana acaba de abrir al público un nuevo recorrido adaptado para personas con movilidad reducida. Este recorrido tiene una longitud de 420 metros de ida y vuelta, y permite disfrutar de una vista general de las salinas.
Este recorrido se suma a la maqueta puesta a disposición de las personas ciegas o con baja visión con el fin de que puedan tocar y conocer a través del relieve la arquitectura, estructura y formas del Valle Salado.
El Valle Salado continúa trabajando para mejorar su accesibilidad con el desarrollo de proyectos como el diseño de rutas en bicicleta adaptada para personas con movilidad reducida.
Puedes conocer todo sobre el Valle Salado, sus visitas y productos en www.vallesalado.com